Esto creo:
No hay derecho…
La
fiesta anual del “Gauchito Gil”, es desde hace 9 años, un acontecimiento
esperado por toda nuestra comunidad y sus visitantes a lo largo de todo el año
y congrega mayor cantidad de público que cualquier otro acontecimiento, rentado
o gratuito, que se realice a lo largo de todo el año por estos lares.
El esfuerzo que desde su primera edición realizan
Bochi Cedré y Ester García y un grupo de colaboradores, prácticamente desde el
cierre de cada edición hasta la próxima, es realmente impresionante y
encomiable, y permitió que se consagrara con el correr de las ediciones como un
acontecimiento familiar donde disfrutar la música litoraleña y un rato de sano
esparcimiento entre vecinos, turistas y promesantes al “gauchito milagrero”.
Nunca hasta anoche se registró, o al menos trascendió,
un solo hecho incorrecto o violento, que empañara tanta alegría y tanto
esfuerzo. Un minúsculo grupo de “los de siempre”, viejos conocidos de policías,
fiscales y jueces, no solo empañaron la noche, sino que obligaron a suspender
el espectáculo que transcurría en sana algarabía y que, si se mira bien, hasta
podría haber sido causal de una tragedia si se producía un desbande o avalancha
por miedo de los que solo había ido a disfrutar y pasarla bien.
El hecho que el herido haya decidido no denunciar a su
agresor, cosa que a policía, fiscales y jueces no les costaría mucho averiguar,
manda a ”vía muerta” cualquier acción
tendiente a castigar y hacer responsables a quienes en su desprecio por las
leyes y la vida normal parecieran no conocer limites a sus tropelías.
Creo que sería bueno y sano que los magistrados y
policías actúen de oficio para establecer responsabilidades y responsables de
este hecho y ponerlos a buen recaudo, porque no hay derecho que estos sujetos
puedan arruinar esfuerzo, gastos, trabajos y la alegría de una comunidad que
solo quería pasar un rato agradable con sus vecinos y visitantes, y que de una
buena vez por todas “Será justicia”. Julio Ramón ALCALDE.
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